LA NECESIDAD DE CURAR LA ROCA VIVA

Al momento de elegir la roca viva para tu reef, es fundamental que compruebes que está curada, es decir que han cumplido con el período de cuarentena necesario y además, se han eliminado todos los posibles desechos y organismos muertos. Si esto no se cumpliera, al introducir la roca en tu acuario esos desechos comenzarían a pudrirse en tu sistema, rompiendo el equilibrio del mismo.

Lo mejor siempre es comprar la roca viva en comercios especializados y en los que confíes. Una buena manera de testear si la roca ha sido curada es comprobar su olor. Si huele a mar, estás ante un producto fiable, si tiene un dejo a sulfatos similar al de los huevos podridos.

Otra buena idea, si tenés alguna duda sobre lo curada que esté la roca, es introducirla en etapas (obviamente si compraste más de un trozo) para no correr riesgos mayores.

Al extraerse del mar, la roca es cepillada en ese mismo momento para eliminar en las aguas marinas los desechos principales. Luego, serán embaladas debidamente y enviadas a los acuarios especializados quienes deberán repetir el proceso de cepillado en condiciones especiales y la cuarentena mencionada. Recién después de todo este proceso pude entrar en tu acuario con tranquilidad, para disfrutar del mejor filtro biológico que la naturaleza pueda regalarle a tu reef y uno de los más maravillosos espectáculos marinos. Una combinación perfecta entre belleza y equilibrio natural.

Podés entrar en la web de Acuario Atlántida para ver la roca viva importada de FIji y debidamente curada, además de otras especies marinas y corales. www.atlantidaacuario.com.ar